Apatia en soledad me provocas...
!Oh soledad que tanto prometias no abandonarme!,
lo hiciste cuando por fin quería lastimarme
y tu, mísera y asquerosa ironía, hiciste que yo empezara amarle.
!Oh soledad que tanto prometias no abandonarme!,
lo hiciste cuando por fin quería lastimarme
y tu, mísera y asquerosa ironía, hiciste que yo empezara amarle.
Javiera. says:
Soledad e ironía, cuál de las dos más traicionera.
Me gustó mucho esta entrada, es como poética y protestante :)
Saludos.
8 de abril de 2009, 17:04
Flakicienta says:
Si a mi tambien me agrada!!!
:)
y la fotoo
me recuerda a una facultad
no se bien cual
:P
29 de abril de 2009, 21:26